23 febrero 2021

FLORA DE LA PATAGONIA -ARGENTINA


La flora de la Patagonia argentina es un reflejo de la adaptación de la vida vegetal a condiciones extremas, como fuertes vientos, bajas temperaturas y suelos pobres en nutrientes. Esta región alberga una diversidad de especies únicas, muchas de ellas endémicas, que se distribuyen en distintos ecosistemas:

🌿 Ecosistemas y especies representativas

1. Estepa patagónica
Caracterizada por su vegetación baja y resistente a la sequía, predominan:

- Coirón (Festuca gracillima): gramínea adaptada a suelos áridos.
- Mata negra (Junellia tridens): arbusto leñoso típico de zonas secas.
- Calafate (Berberis buxifolia): arbusto espinoso con frutos comestibles.

2. Bosque andino-pata…
 - Senecio (Senecio filaginoides): arbusto que tolera suelos salinos.


🌸 Adaptaciones al clima extremo

Las plantas patagónicas han desarrollado estrategias para sobrevivir en condiciones adversas:

- Resistencia al viento: formas compactas y crecimiento rastrero.
- Tolerancia al frío: mecanismos antifreeze en tejidos.
- Conservación de agua: hojas pequeñas y cerosas para reducir la transpiración.


🛡️ Conservación y áreas protegidas

La preservación de estos ecosistemas es vital. Parques nacionales como Los Glaciares, Nahuel Huapi y Lanín protegen vastas áreas de flora nativa, asegurando la supervivencia de estas especies únicas y el equilibrio ecológico de la región.

La flora patagónica no solo embellece el paisaje, sino que también desempeña un papel crucial en la ecología y cultura de la región. Su estudio y conservación son esenciales para mantener la biodiversidad y comprender las adaptaciones de la vida vegetal a entornos extremos.


FLORA EN TIERRA DE FUEGO

Los bosques cubren un 30% de la superficie de la Isla. Las principales especies son:
Lenga: es un árbol de hojas caducas que crece desde el nivel del mar hasta los 600 metros s.n.m.. Su tronco es recto y su corteza es de color gris. Se adapta a condiciones extremas de clima y suelo.
Guindo: es un árbol que se caracteriza por sus hojas perennes, crece en lugares muy húmedos y se lo encuentra al sur del Lago Fagnano. Es conocido también como Cohiue Magallánico.
Ñire: presenta gran cantidad de ramas y su porte es bajo. Sus hojas son caducas y ocupa lugares bajos.
Canelo: es un árbol que se presenta también como arbusto. Sus hojas son ovaladas, grandes y brillantes. Sus flores son blancas o rosadas y florecen en ramilletes durante el verano. Sus frutos presentan un color verde oscuro.
Ciruelillo: su porte de árbol o arbusto, de acuerdo al lugar donde crece, presenta una corteza lisa, hojas de formas variadas y flores en racimos de color rojo intenso. Sus frutos pueden verse en vainas doradas.
Maitén o leña dura: prolifera en las costas del Canal de Beagle, alcanzando la altura de dos a tres metros. Sus flores son muy pequeñas y de color rojo oscuro.
Campanilla: es la flor que representa a la Provincia de Tierra del Fuego. Crece cerca del mar floreciendo entre Noviembre y Enero. Presenta un largo tallo con grupos de dos a siete flores de color blanco o crema con estrías púrpuras y el centro amarillo.





La flora de la Patagonia argentina es diversa y única debido a las variadas condiciones climáticas y geográficas de la región. La Patagonia abarca una gran extensión de territorio en el extremo sur de Argentina, incluyendo áreas áridas, semiáridas, montañosas, y bosques templados.

Estepa Patagónica: Dominada por arbustos espinosos y gramíneas adaptadas a las condiciones áridas. Entre las especies más comunes se encuentran el neneo (Mulinum spinosum), el coirón (Festuca spp.), y el mata negra (Senecio spp.).

Bosque Andino-Patagónico: Ubicado en las laderas de la cordillera de los Andes, este bosque es más húmedo que la estepa. Caracterizado por árboles como el coihue (Nothofagus dombeyi), el ciprés de la cordillera (Austrocedrus chilensis), y el ñire (Nothofagus antarctica).

Bosque de Lengas y Ñires: Este tipo de bosque se encuentra en áreas más altas y frías de la Patagonia. La lenga (Nothofagus pumilio) y el ñire son los árboles dominantes, junto con especies como el calafate (Berberis buxifolia) y el chaura (Azara dentata).

Bosque Subantártico: En las áreas más húmedas y cercanas a la costa atlántica, se encuentran bosques de árboles perennifolios como el ciprés de las Guaitecas (Pilgerodendron uviferum), el mañío (Saxegothaea conspicua), y el arrayán (Luma apiculata).

Estepa de Coirones: Presente en zonas semiáridas, esta vegetación está dominada por pastizales de coirón (Festuca gracillima) y otros pastos duros y resistentes a la sequía.

Tundra Patagónica: En las regiones más altas y frías de la Patagonia, la vegetación se asemeja a la tundra, con pastizales, musgos, líquenes y arbustos enanos.

La flora de la Patagonia ha evolucionado para adaptarse a las condiciones extremas de esta región, con una variedad de plantas adaptadas a la sequía, el frío y los vientos fuertes. Muchas de estas especies son endémicas de la región y desempeñan un papel importante en los ecosistemas patagónicos, proporcionando hábitats y alimento para la fauna local.













































Flora de Ushuaia

Lenga (Nothofagus pumilio): Árbol de hojas caducas, asimétricas y lustrosas, estas toman una tonalidad que pasa del rojo intenso al amarillo o marrón antes de caer. Cuando las hojas adquieren estos colores, durante el otoño, el paisaje muestra un cuadro de colores de espectacular belleza. Puede alcanzar 30 m. de altura y 1,5 m. de diámetro, llega a reducir su porte a 20-50 cm., adoptando una forma arbustiva y achaparrada, a 600 m. de altura sobre el nivel del mar.

Guindo (Nothofagus betuloides): También llamado “Coihue” de pequeñas hojas alargadas y perennes. Puede alcanzar los 30 m. de altura y 1,20 m. de diámetro. Cuando crece en suelos pedregosos y delgados presenta una forma arbustiva, tortuosa y achaparrada. Tanto la lenga como el coihue pueden ser atacados por parásitos, el Myzodendron Punctulatum Banks (sub-arbusto sin hojas) y el Cyttaria darwinii, conocido como "pan de indio", porque era uno de los elementos que incluían en su dieta los indígenas. Este hongo, de color blanco amarillento, aparece en otoño e invierno y tiene unos 3,5 cm de diámetro, siendo de forma esférica. La acción de este parásito provoca una deformación sobre la rama o tronco del árbol, denominada "nudo".

Ñire (Nothofagus antartica): De hojas asimétricas dentadas, lustrosas y caducas. De porte arbustivo, se desarrolla tanto en suelos inundados como en sitios con escasas precipitaciones.

Calafate (Berberis buxifolia): Arbusto muy ramificado que presenta muchas espinas. Se destaca en verano entre los árboles del bosque por sus pequeñas flores amarillas, que luego se transforman en deliciosos frutos, que presentan una coloración negro-azulada. Una leyenda señala, que aquel que come el fruto de este arbusto regresa al lugar.

Michay (Berberis ilicifolia): Arbusto que posee hojas de color verde intenso, las asemejan al muérdago. Se mantiene siempre verde y antes de finalizar el invierno presenta una floración de color anaranjado, mientras que sus frutos de color azulado, maduran en otoño.

Mata Negra (Chilliotrichum diffusum): Este arbusto tiene flores que se asemejan a pequeñas margaritas, que perduran hasta el otoño. Mantiene siempre su color verde y crece tanto en el llano como en la montaña.Campanilla Biflora (Phaiopheleps): La campanilla es de color blanco o crema con estrías púrpuras, agradablemente perfumada. Florece entre Noviembre y Enero. El tallo fluctúa entre 9 y 70 cm. con grupos de 2 a 7 flores. Ha sido elegida la flor representativa de la Provincia de Tierra del Fuego. Crece en casi todos los ambientes de la Isla.

Frutilla de Magallanes (Rubus geoide): Crece en aquellos lugares que conservan cierta humedad, bajo la protección de algún tronco caído o en el reparo del talud de las barrancas. Esta deliciosa fruta de color rojo y sumamente dulce, es similar en apariencia a la mora. Se halla medio enterrada y un tanto cubierta por las pequeñas hojas de la misma planta. Su fruto crece entre Octubre y Febrero.

Drosera (Dosera uniflora): Esta planta insectívora mide de 4 a 5 mm. Sus tentáculos de color rojizo, segregan en los extremos una sustancia melosa que le sirve atraer y atrapar a los insectos. Crece sólo en lugares muy húmedos y florece en Diciembre y Febrero.Turbales (Sphagnum magellanicum): La turba está constituida por restos vegetales, principalmente de briofitas (o musgos). Tienen una enorme capacidad para la retención de agua y por tanto, son activas creadoras de la humedad ambiental. La enorme capacidad de retención de agua de los turbales se debe a las propiedades absorbentes del musgo Sphagnum. Los turbales cubren el 1% de la superficie de la Tierra y su formación tomó largo tiempo. Por ejemplo, un depósito de 1,5 m. de profundidad se constituyó nada menos que en 6000 años.


LOS CARDONES-SALTA-ARGENTINA











Los Cardones (parque nacional) Molinos, Salta, Argentina


El Parque Nacional Los Cardones se encuentra en la Provincia de Salta, Argentina.
Fue creado en 1996 y posee alrededor de 65.000 ha en un ambiente de sierras secas, entre los 2.700 y 5.000 m de altura.
La vegetación predominante es la de prepuna, conformada principalmente por cardones, aunque también se encuentran especies características del monte, de la puna y de los altos Andes.
En el parque se encuentran restos paleontológicos de importancia, como huellas de dinosaurios de 70 millones de años de antigüedad. Éstas huellas son objeto de estudio para científicos. También hay pinturas rupestres.
El área era de importancia para las culturas prehispánicas, ya que los pastores encontraban agua y pasturas en donde alimentar sus rebaños.
El parque no posee infraestructura adecuada para recibir turistas.
A la Reserva la atraviesa un recta perfecta que se llama la Recta del Tin-Tin Entre cardones y flores de amancay, se despliega este Parque Nacional, un enorme bolsón de 65.520 hectáreas extendidas entre los departamentos de Cachi y San Carlos, a 100 km de Salta. En 1996 se creó esta reserva, junto a las joyas selváticas de El Rey y Baritú, con el fin de proteger una admirable área que abarca cuatro ambientes naturales diferentes, principalmente las sierras y quebradas secas, entre los 2.700 y 5.000 metros de altura. Allí predomina la formación arbustiva propia de la prepuna, además de comunidades típicas del monte y, en las cumbres, de la puna y los altos Andes.
Limita al este con las altas cumbres, destacándose las cúspides del Cerro Malcante, Sierra del Candado, Filo del Pelado y las nacientes del río Escoipe; al oeste las sierras Colorada y de la Apacheta; al norte el Abra del Pozo Bravo y al sur, una línea imaginaria divide por la mitad el valle de Tonco o Los Colorados. Por la conformación de sus zonas, es comparable con el monumento natural Saguaro y el Parque Nacional Organ Pipe Cactus, en Estados Unidos. Entre los valles de Lerma y Calchaquí, se erige el majestuoso Cerro Negro o Malcante. Desde sus 5050 m.s.n.m., en los días despejados pueden apreciarse claramente Cachi, Salta y Cabra Corral, además de los picos nevados que lo rodean.
En otro sector del Parque, casi al finalizar la zona conocida como Cuesta del Obispo, se encuentra el Valle Encantado. Orgulloso de su nombre, sus hermosas lagunas formadas en épocas de lluvia, que se congelan en invierno, y el suelo tapizado de flores multicolores resaltando entre las caprichosas formaciones rocosas, contrastan con la diafanidad del cielo. En esta exquisita atmósfera, se pueden apreciar pinturas rupestres y avistar algunos cóndores que sobrevuelan el lugar. Todo el paisaje silvestre cobija especies de flora y fauna características de Los Cardones.

La vegetación predominante es la de la provincia fitogeográfica Prepuneña, conformada principalmente por cardones nombre local dado a los grandes cactos de la especie Echinopsis atacamensis, aunque también se encuentran especies características del distrito fitogeográfico del Monte de Sierras y Bolsones de la provincia fitogeográfica del Monte, de la Provincia fitogeográfica Puneña, y del distrito fitogeográfico Altoandino Quechua de la provincia fitogeográfica Altoandina.

En el parque nacional se encuentran restos paleontológicos de importancia, como huellas de dinosaurios de 70 millones de años de antigüedad. Estas huellas son objeto de estudio para científicos. También hay pinturas rupestres.

El área era de importancia para las culturas prehispánicas, ya que los pastores encontraban agua y pasturas en donde alimentar sus rebaños.

El parque nacional no posee infraestructura adecuada para recibir turistas. Es atravesado por la ruta provincial n.º 33 por 38 km de asfalto, que vincula el valle de Lerma con los valles Calchaquíes y forma una recta perfecta que se llama la Recta del Tin-Tin. Sobre esa ruta se halla el acceso principal y existen paradas de ómnibus en El Churcal y en Zapallar. De la ruta n.º 33 se desprenden las rutas provinciales n.º 42 (de ripio, hacia Seclantás), 48 (de tierra, hacia la escuela de Cerro Negro), 27 (secundaria, une Zapallar con Isonza y con Amblayo) y 26 (huella, hacia la mina Don Otto).

Senderos: Ojo de Cóndor, Secreto del Cardonal, Caminos del Pasado, Cerro Negro, Cerro de los Milagros, Campos del Churcal, Piedra-Filo del Pelado, Filo del Pelado-Valle Encantado, Valle-Rumiarco, Circuito Suroeste, Circuito Sureste, Huellas de Dinosaurios.